lunes, 26 de enero de 2009

El dia en que los 30 me pegaron bien

Asi que resultaron ser como esas drogas que no te gustan de una pero que hay que aprender a tomarlas. De esas que solo te pegan bien cuando te dejas llevar y te relajas, mira vos.

Tampoco te digo que voy a cambiar toda la musica de mi i-pod por Knuffel-Rock porque espero no ponerme asi ni a los 70, pero que disfrute con ojos cerrados un mix de Bon Iver, Feist y The Kings of Convenience, eso si.

Otra cosa que me paso fue que decidi en vez de salir quedarme tres noches seguidas del fin de semana en mi casa, viendo Slumdog Millionaire, Revolutionary Road y una seguidilla de The Office USA y esto me parecio un muy buen trueque.

Es la primera vez que ni me importo que un paciente me trate "usted". En vez de pasar por toda esa cosa de "podes tutearme jjajaja bueno esta bien" y sentirme como una psicologa principiante decidi por una vez asumir el rol de terapeuta a la que le dicen usted y de repente colgue un cuadro en el consultorio y cambie el cartelito con mi nombre que estaba colgado al lado de la puerta por uno en el que mi nombre este bien escrito y lo hice mio. Por arte de magia mis pacientes se pusieron las pilas y empezaron a laburar en serio.

Por primera vez en años tengo tres plantas en mi casa que sobreviven. Era solo cuestion de riego, obviamente, pero ya hubiera sido el colmo si depsues de dos años de maternidad ni me hubiera dado cuenta de ese preciado secreto.

Regla para la mujer de treinta que ignore durante 10 meses pagando el precio de una baja autoestima, una irracional aversion contra los espejos a las 9 de la mañana y el de una vez al mes ser confundida con una pobre adolescente que sufre de acne juvenil: maquillaje antes de abandonar la casa. A donde sea. Al trabajo, al supermercado, a sacar la basura.

Tanta historia no era, che. Y eso sumado a que en Holanda tener treinta tiene onda. Y que una vez al mes sigo saliendo de desquicie como en los viejos tiempos aunque despues tarde cuatro dias en recuperarme y repita la celebre frase de mi madre para mis adentros "calavera no chilla". No esta tan mal.

12 comentarios:

Bandida dijo...

Bueno, pero, por lo que me parecio, tambien tuviste un bebe, no? Eso tambien es una gran diferencia!!! o es una tragedia?

tu dime.

Vivalapepa dijo...

Es una gran diferencia, por supuesto! Pero a veces veo a algunas mujeres que apenas tienen un bebe se tranforman en en otra persona, son MAMAS, y depsues el resto. Yo tuve un bebe y sin contar los meses de embarazo y de lactancia segui siendo la misma persona! Y eso estaba bien, pero hace mas dificil aceptar las limitaciones de la nueva fase...

Ajenjo dijo...

Pepona, siempre creí que los 30s son la plenitud femenina. No hay adolescente mas linda y atractiva que una treintaniera. Y una treintañera que sonrie, como sospecho que hacés vos (con y sin humo), pues, mas todavía.

beso
A

Vivalapepa dijo...

Ay Ajen, si no sonreia, despues de tu comment sonrio de oreja a oreja.....!

Franky dijo...

Felicitaciones pepa, pero no se me venga vieja que todavía hay nafta por quemar!

lexi dijo...

Genial! felicitaciones!!!!!!
Cuando cumplí 30, dije "ahora todo me importa un carajo" entonces conocí al padre de mi hija!





abraxo de verano!

Jota dijo...

sos una pendeja

disfrutá, a los 30 empieza la vida
;)

Gran Lady dijo...

Como dijo el célebre filósofo Homero Simpson "antes rockeaba todos los días y me reventaba todas las noches, luego una vez por semana, y ahora tengo suerte si encuentro dos horas por semana para ponerme cargoso". ¡Estamos en la mejor edad! Aguanten los 30 (y los 30 y pico también)

sushi punk dijo...

grande pepona!!!

un beso para ti (y todos los aplausos)

Zobeid@ dijo...

mis veintisiete me parecen treinta, debe ser por la mimetización con n que cumple 31. linda edad vivalapepa.

salutis




*comenta anterior: nunca me aprendi la listita.

Sweet carolain dijo...

ay ay psicologa de 30! pero en holanda. Ok, me parece que me mudo!

Anónimo dijo...

Llegue a tu blog por casualidad y me hiciste pasar un lindo rato en un dia gris. Me gusta como contas tu mundo. Saludos de un nuevo visitante treintañero...